30 de septiembre de 2015
Ludovico Gagliardi se había convertido en el icono de Calascibetta, la pequeña localidad siciliana donde nací. Recuerdo que cada vez que regresaba al pueblo por vacaciones, niños y mayores íbamos a la plaza mayor, a esperar la llegada del autobús junto con el alcalde, que se hacía acompañar por la banda municipal para recibirlo con todos los honores. Admirábamos a Ludovico, que se había marchado a París, donde, según nos contaba, pasaban muchas cosas importantes. Tantas, que sobre sus hombros, decía, recaía una parte del peso de la historia. Muchos años después supe que lo que Ludovico cargó sobre sus hombros fueron los equipajes de las más distinguidas figuras de la política, porque era botones en el Hotel Ritz de París. Pero fue algo que nunca conté en Calascibetta.
· Fondo musical para acompañar la lectura: Trio LEscano & Maria Jottini - Maramao perchè sei morto.
29 de septiembre de 2015
Fue aquel 2 de junio de 1989 cuando un tal Georges Marchand presentó una tesis doctoral en la Universidad de la Sorbona sobre la batalla del Somme en la que desmontaba la versión oficial vigente desde 1916. El prestigio que gozaba nuestro apellido se desplomó del día a la noche como un castillo de naipes, generando un escándalo de tal magnitud que hasta el senado se vio obligado a pronunciarse tachando el asunto de ser una grave infamia contra la nación. El bisabuelo, el hombre que se convirtió en héroe nacional por su arrojo y valentía en aquel combate fue en realidad un farsante que manipuló los hechos con total impunidad. Mi abuelo, quien fuera un influyente diplomático en su época, sufrió un fulminante ataque al corazón al ponerse en cuestión la reputación de la familia; como la prometedora carrera política de mi padre se truncó teniendo que renunciar a su candidatura a las elecciones presidenciales. La prueba gráfica que Marchand presentó demostró de manera concluyente que el bisabuelo no había estado en el Somme, porque en aquella batalla no intervino ningún regimiento de caballería.
· Fondo musical para acompañar la lectura: Marcelly - La madelon.
23 de septiembre de 2015
En su intención de velar por la estabilidad de su matrimonio, la tía Hildegard acabó siendo sin pretenderlo una mujer avanzada en su época. Y es que su miedo fue en aumento a medida que el tío Boniface pasaba cada vez más horas en las carreras automovilísticas. Y aunque no era un hombre demasiado atractivo, sino más bien bajito y algo esmirriado, tampoco era de piedra, pensaba la tía, porque en los circuitos había mucha jovencita atrevida y no eran pocos los que acababan sucumbiendo a sus encantos. Por ello decidió hacer de tripas corazón y tener un poco más de complicidad con su marido, implicarse más en su afición. Pero lo que no pudo imaginar la tía es que se involucró tanto en aquel mundo, que acabó siendo la primera mujer que ganó las veinticuatro horas de Le Mans, porque el tío Boniface, que era mecánico, no sabía conducir.
· Fondo musical para acompañar la lectura: Sam Lanin and his Orchestra - We careful with those eyes.
21 de septiembre de 2015
Mi abuelo Wolfgang murió en la indiferencia, menospreciado por sus antiguos compañeros de trabajo que vieron en él antes a un iluminado de extravagantes ideas que al ingeniero que contribuyó al desarrollo de la automoción. Porque él, según contaban en casa, desde que abrazó el marxismo en su juventud había canalizado su fuerte compromiso social a través de sus diseños, lo que le había ocasionado no pocos enfrentamientos con los dirigentes de la empresa. Hasta que aquel 28 de mayo de 1932, tras presentar su nuevo prototipo de transporte colectivo, fue despedido de manera fulminante sin que nadie pudiera imaginar que el abuelo había sentado las bases de lo que después sería el autobús.
· Fondo musical para acompañar la lectura: Marek Weber und sein Orchester - Crepuscule (tango).
16 de septiembre de 2015
Esta vez tuvimos que partir de madrugada, con papá musitando improperios para no enfadar a mama, que en esos momentos estaba a punto de tener un ataque de nervios porque la abuela había vuelto a hacer otra de las suyas. Por enésima vez se había vuelto a escapar de casa, lo que se convirtió en algo habitual desde que vino a vivir con nosotros. Hasta entonces nunca se había ido demasiado lejos, a pesar de que ya nos habíamos llevado unos cuantos sobresaltos. Pero ahora el susto fue monumental cuando nos comunicaron que estaba en una pequeña localidad de Montana donde la encontraron haciendo nuevas amistades. Y lo peor no fue eso, sino la inquietud que se generó en sus habitantes, porque hasta allí había ido el ejército. Inquietud que se transformó en terror cuando aterrizamos en nuestro platillo para recogerla.
· Fondo musical para acompañar la lectura: Ella Fitzgerald - Two little man in a flying saucer.
15 de septiembre de 2015
Mi acto fue consecuencia del hartazgo. Una forma de protesta, de rebeldía. Quizá poco meditada y demasiado inocente. Pero no podía aguantarlo más. Aún no comprendía muchas cosas de los adultos, pero aquello había llegado a tales extremos que sentí la necesidad de salvaguardar mi integridad física ante los míos. Tenía que demostrar que tenía sentimientos y sobre todo voz propia. Pero mi acción reivindicativa duró poco, justo hasta el momento en que a la abuela le dio un amago de infarto cuando al llegar a casa me vio de tal guisa sentado en el porche. Pero nadie entendió nada, y menos aún el abuelo quien, enfadado por lo que creía que había sido una broma de mal gusto, me dio un par de cachetes en la cabeza. Él, precisamente él, el antiguo estibador incapaz de controlar su fuerza, el origen de mis males, el motivo de mi insurrección, la causa de mi sufrimiento por su dichosa manera de saludarme, agarrándome el moflete y zarandeando mi cabeza unas cuantas veces.
· Fondo musical para acompañar la lectura: Cannon's Jug Stompers - Heart-breakin' blues.
11 de septiembre de 2015
Habíamos llegado aquella mañana del 14 de julio de 1935 a Washington siguiendo la pista de Ernst Steiner. Pero lo que no pude imaginar es que mi ayudante acabaría truncando la operación por culpa de sus extravagantes gustos gastronómicos. Una operación que había comenzado un año antes, ante la sospecha de que Steiner era un agente de contraespionaje, llevándonos a seguir su rastro por varias ciudades de Europa. Hasta que en Lisboa cogió un vuelo a Washington. Al llegar allí se confirmaron nuestras suposiciones, con el agravante de que descubrimos que tenía contactos con las altas esferas diplomáticas. Entonces la misión adquirió un nuevo caríz al vernos obligados a medir con exactitud cada uno de nuestros pasos. Es por eso que, cuando supimos que era uno de los invitados a la comida que la embajada Francesa había organizado con motivo de la celebración de su fiesta nacional, tuvimos que actuar con la máxima discreción, porque estábamos sentados en la misma mesa que él. Pero a mi ayudante no se le ocurrió mejor idea que poner ketchup en las ostras, malogrando definitivamente la operación.
· Fondo musical para acompañar la lectura: Weintraub Syncopators - Nostalgico slow.
10 de septiembre de 2015
“Modeste Deveraux o el nacimiento de retrato panorámico”
I. La causa…
Modeste Deveraux no pudo imaginar aquel día de primavera, cuando adquirió ese novedoso aparato que vio en el escaparate de la tienda de Émile Giroux, que iba a cambiar el concepto del retrato fotográfico. Ni tan siquiera fue consciente de ello, porque Modeste, movido por su orgullo de padre, quería tener un recuerdo de sus seis hijas, ya que estas crecían con demasiada rapidez. Y en las siguientes semanas, durante los ratos libres que le dejaba su pequeño negocio de calzado, se entregó al estudio del funcionamiento de su nueva cámara. Hasta que llegó el día en que decidió inmortalizar a sus hijas. Tras probar diferentes poses, sacó la que fue su primera fotografía. Y a pesar de la limitación de medios, porque solo tenía dos placas, su afán investigador le llevó a realizar una más, cambiando con ella la forma de entender el retrato...
· Fondo musical para acompañar la lectura: Sister Rosetta Tharpe - Stranger things happening everyday.
9 de septiembre de 2015
II. … y el efecto
Al revelar la primera placa hubo algo en aquella imagen que no convenció del todo a Modeste Deveraux. Pero aún le quedaba una placa, pensó. Así que comenzó con sus seis hijas experimentar nuevas poses, moviéndolas de un lado a otro. Y estas, fascinadas por la idea de que esa caja de madera provista de una pequeña lente preservaba a las personas para la posteridad, se entregaron a las indicaciones paternas como si de un juego se tratase. Que si ahora se colocaban en círculo, que si después formando un hexágono, que si con los brazos levantados, que si con las manos detrás. Pero Modeste no lograba encontrar la composición deseada. Hasta que en un momento de desesperación, tropezó con el trípode haciendo girar la cámara noventa grados. Y tuvo una idea. Dispuso a sus hijas formando una torre para que entrasen en el encuadre. Modest quedó tan satisfecho que nunca volvió a utilizar la cámara. Pero su fotografía vertical, por cosas del azar, fue el origen de una moda que acabaría causando furor en Europa.
Fondo musical para acompañar la lectura: Hubert Simplisse et son Ensemble - Simplicites.
8 de septiembre de 2015
· Fondo musical para acompañar la lectura: Boswell Sisters - Everybody loves my baby.
4 de septiembre de 2015
Hasta que aquel aciago 6 de abril de 1929 una pequeña diferencia quebró el sueño que levantamos de la nada, habíamos estado muy unidos desde que nos conocimos en la escuela elemental. Y juntos fuimos a la universidad, y juntos estudiamos la misma carrera, pedagogía. Luego vino el amor. Y el matrimonio. Nos casamos las tres parejas el mismo día. Y después vino la idea de Rémy que aquella noche a nosotras nos pareció peregrina, ya que estaba algo perjudicado por el alcohol. Una idea que Gaston y Alphonse apoyaron, aunque también influidos por la bebida. No sé muy bien como nos convencieron, pero empezamos en un pequeño local. En pocos años nuestros triciclos obtuvieron un enorme éxito de ventas. Hasta que ese funesto 6 de abril, tras reunirnos el consejo de la empresa, un pequeño detalle fue el detonante del conflicto. Alphonse y Odette se habían separado, porque cada uno tenía su triciclo.
· Fondo musical para acompañar la lectura: Rutt Etting - Button up your overcoat
3 de septiembre de 2015
Las vacaciones habían terminado. Aquella tarde hice mi equipaje con cierto nerviosismo. Iba a iniciar mi tercer año en la universidad. Y a pesar de que en el campus tenía fama de rarito, me hacía ilusión comenzar el nuevo curso. Pero antes tenía que soportar lo que mis padres habían convertido en una nueva costumbre desde que me marché a estudiar al extranjero,la escenita de lloros y reproches que montaban antes de mi partida, con el semblante serio de mi padre mostrando su desaprobación y los sollozos de mi madre preocupada por los riesgos de un viaje tan largo y a un sitio demasiado lejano. Y yo, antes de introducirme en la cápsula, siempre les decía que el teletransportador del Dr. Emory Erickson era un medio rápido y seguro. Y que además, en el planeta Tierra me sentía muy a gusto.
· Fondo musical para acompañar la lectura: Les Paul & Mary Ford - World is waiting for the sunrise